El Gobierno de Milei despide a 15.000 funcionarios y revisa los contratos de otros 55.000

Cecilia Valdez BUENOS AIRES / E. LA VOZ

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El portavoz presidencial argentino, Manuel Adorni, en una imagen de archivo.
El portavoz presidencial argentino, Manuel Adorni, en una imagen de archivo. AGUSTIN MARCARIAN | REUTERS

El ultraliberal anunció el martes que «van a caer 70.000 contratos»

28 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El presidente de Argentina, Javier Milei, amenazó con despedir a 70.000 funcionarios, y se jactó de haber echado a 50.000 desde el comienzo de la legislatura. En el inicio de un fin de semana especialmente largo (6 días), el Gobierno anunció la baja de 15.000 contratos. Muchos trabajadores de distintas dependencias públicas empezaron a recibir las notificaciones de despido.

El martes pasado, durante su intervención ante empresarios en el Foro Económico Internacional de las Américas, Milei sostuvo que «van a caer 70.000 contratos», y agregó: «Hemos eliminado las transferencias discrecionales a las provincias y también echado a 50.000 empleados públicos». Casi en penumbra, dado que pidió apagar las luces y no tomar fotos con flash, el presidente también se refirió a la reducción de puestos de trabajo: «Cuanto más violento y prolongado en el tiempo es el sobreestimular de la economía, más fuerte es esa reducción». Los números indican no solo una profunda caída en el sector público, sino también en el privado, donde cada vez hay más suspensiones, despidos y empresas que cierran.

Desde el Gobierno se encargaron de aclarar que la cifra de 70.000 corresponde a contratos que se encuentran «en revisión» y, en su conferencia de prensa diaria, Manuel Adorni, el portavoz presidencial, confirmó el miércoles que «se va a proceder a dar de baja 15.000 contratos que vencen el 31 de marzo». Se trata, en su mayor parte, de contratos prorrogados en diciembre para ser auditados. Adorni señaló que los 55.000 restantes serán prorrogados seis meses más mientras se siguen analizando, y que las bajas no incluyen ni al PAMI (mutual de los jubilados) ni a empresas públicas, con lo que se trata de un número estimativo.

Esto forma parte del plan de ajuste que el Gobierno de La Libertad Avanza viene implementando desde que ascendió al poder: aplicar la motosierra en el Estado. Gracias a él, el oficialismo celebra un superávit a costa de licuar salarios, reducir el consumo, aumentar tarifas, recortar los fondos a las provincias y despedir de forma masiva. En ese sentido, en el mismo foro donde compareció Milei, Rodrigo Valdés, director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, felicitó al Gobierno por el superávit fiscal de enero y febrero, pero también exigió que «el peso del ajuste no caiga sobre las familias trabajadoras».

Por su parte, los distintos organismos cuyos trabajadores están siendo afectados por los despidos, como el Servicio Meteorológico Nacional o la Administración Nacional de la Seguridad Social, ya anunciaron medidas de protesta. La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), a través de su Secretario General, Rodolfo Aguiar, señaló que la semana próxima podría haber «ocupaciones pacíficas» de los ministerios y dependencias afectados, además de una huelga nacional activa.